«Nuestros superhéroes, los árboles, y nuestra pasión, hacerte feliz con ellos.»
Seguramente ya hayas caminado por el bosque en alguna excursión, pero ¿has cruzado un bosque desde el aire? Esta actividad no tiene nada que ver con el arborismo. Aquí, recorres libremente, a tu ritmo y con total autonomía este entorno arbolado.
Puedes optar por divertirte, por hacer deporte o por practicar la contemplación, ¡tú eliges!
#Onírico
Apenas subas a las redes, te encontrarás bajo el espeso follaje de los árboles. La danza de la sombra y una ligera brisa te acompañarán mientras descubres el parque.
Detente y túmbate un instante. Escucha el sonido del viento en las hojas, el ligero crujir de las ramas y el canto de los pájaros… Deja a un lado tu sentido de la orientación, aquí no te servirá de nada. Déjate llevar al corazón de este bosque ancestral.
Una vez dentro, olvídate del transcurrir del tiempo y disfruta al máximo de este momento relajante.
#Desafío
Practicar deporte a quince metros de altura es, cuanto menos, una idea sorprendente.
Prepárate para poner a prueba tus capacidades y reta a tus amigos o a tu familia en las numerosas actividades deportivas: una carrera, un partido de fútbol en las alturas, un concurso para ver quién salta más tiempo… ¿Te atreves con el desafío?
Una experiencia inédita para los aficionados a los retos en la que entregarse a fondo en las distintas disciplinas mientras se está suspendido sobre el vacío.
#En compañía
¿Es hora de volver a poner los pies en el suelo? ¡Descansa en el Filenbar!
Sabemos que eres muy goloso, por ello el bar ofrece crêpes y dulces, así como perritos calientes, pizzas y sopa casera si prefieres algo salado. El 90 % de los productos provienen de productores locales.
Como en el resto del parque, aquí la palabra clave es el relax, por lo que encontrarás mesas a la sombra de toldos y hamacas a tu disposición.
Es una zona acogedora y familiar perfecta para descansar mientras esperas a tus hijos o a tus amigos que todavía están en el parque de redes.
Tú eliges el camino: onírico, aventurero o relajante.
Una cosa es segura: ¡Filenvol te atrapará en sus redes!
Un plus para terminar
¡Prepárate para cambiar de aires por completo! En medio de esta naturaleza, la tecnología asoma la patita… O, al menos, ¡la hélice!
En Filenvol también puedes volar un dron.
Ponte a los mandos, ¡el parque para drones te espera!