Frágiles y delicadas, las flores de calabacín se pueden comer gratinadas, como buñuelos o como en esta receta: rellenas y bien acompañadas.
La carne magra y delicada del lucio del lago Lemán será perfecta para el sabroso relleno, junto con la deliciosa salsa beurre blanc.
¡Es una delicia!
Ingredientes
Para las flores de calabacín rellenas
– 22 g de sal fina
– 12 g de azúcar
– 375 g de nata líquida 35 %
– 3 huevos de gallinas camperas
– 90 g de mantequilla
– 10 flores de calabacín
Para la salsa beurre blanc
– 80 g de chalota
– 200 g de vino blanco
– 80 g de vinagre de vino blanco
– 5 g de tomillo fresco
– 10 g de diente de ajo
– 40 g de nata líquida 35 %
– 250 g de mantequilla
Pasos de la receta
1.Empieza con el relleno de lucio. Limpia el pescado, quita la espina central, retira la piel y córtalo en trozos hasta obtener una porción de 600 g. Puedes pedir a tu pescadero o pescador que lo haga por ti.
2. Tritúralo con la sal y la pimienta en un robot de cocina. Después, añade los huevos, la nata líquida y, por último, la mantequilla derretida fría. Pásalo por el colador y reserva en una manga pastelera.
3. Retira el pistilo de las flores de calabacín y rellénalas con cuidado con el lucio.
4. Cuece al vapor a 85 ºC durante 10 minutos en una bandeja perforada y untada con aceite. Reserva en la nevera.
5. Para la salsa beurre blanc, elabora la reducción con las chalotas, el vino blanco, el vinagre de vino blanco, el tomillo y el ajo. Deja reducir hasta que se evapore casi por completo.
6. Añade la nata líquida, lleva al punto de ebullición y monta poco a poco con la mantequilla. Rectifica el aliño y pasa la salsa por el colador.
Reserva a 50 ºC.
«Para esta receta, utiliza hortalizas ecológicas y de proximidad. Las flores de calabacín se deben recolectar esa misma mañana para que permanezcan bien abiertas. Para el pescado se puede utilizar trucha o trucha alpina en vez de lucio.»