#1
La Torre de los Pitones
Sólo por la Torre Bastian ya merece la pena divertirse, y las vistas en picado sobre el lago Lemán constituyen una experiencia realmente mágica.
#2
Les Crêts
Desde Les Crêts, o incluso desde la estación de Croisette, la vista panorámica del Mont Blanc es imprescindible en cualquier viaje al Salève. La belleza de este gigante no le dejará indiferente.
#3
La Esplanade du Téléphérique
Mantenga los ojos bien abiertos para contemplar el lago Lemán y el jet d’eau, con toda la cuenca del lago Lemán observándole.